Cambiar las ruedas de un coche es una tarea difícil. Por esto hemos escrito esta guía en la que indicamos 10 pasos a seguir, independientemente de las circunstancias en las que os encontréis. ¡A ver si os ayudan!

Lo primero que hay que hacer es colocar el coche en una zona segura, llana y que no deslice.

En segundo lugar y muy importante siempre debemos ponernos el chaleco reflectante de seguridad, encender las luces de emergencia y colocar los triángulos a unos 50m de donde está el coche. ¡No os olvidéis del chaleco que puede salvaros la vida!

Tercer punto: Para levantar el coche, debe estar primero vacío de pasajeros. En el maletero suele estar el gato, junto con las herramientas para aflojar las tuercas, una rueda de repuesto (según modelos), guantes y demás material útil para el cambio.

Hay que determinar si nuestro coche es de tracción delantera o total. En ese caso, hay que insertar una marcha para que el motor bloquee la rueda (apagando el coche obviamente).

El quinto paso es poner el gato, aunque no lo levantes todavía. Para montarlo debes tener en cuenta que la base debe estar sobre una superficie lisa y que no se hunda, y si esto no es posible, hay que ayudarse con una piedra, ladrillo u objeto muy resistente. El punto de apoyo con el coche no es cualquiera, hay que mirar en los bajos un lugar donde encaje perfectamente. El punto puede estar señalizado con unas flechitas pequeñas.

Tened cuidado: las tuercas de la rueda suelen ir muy apretadas, pero son más fáciles de quitar si no hemos elevado el coche. Hay una herramienta para aflojarlas, no hay que sacarlas del todo. Necesitan emplear mucha fuerza. Así que calma.

Puedes empezar a elevar el coche hasta el nivel en que la rueda pinchada quede suspendida en el aire. Entonces podemos quitar las tuercas y retirar la rueda. Cuidado con el peso que las llantas son muy grandes y pesan mucho. Entonces sacamos la rueda de repuesto de la zona inferior del vehículo y guardamos en su lugar la rueda pinchada.

Momento de poner la rueda de repuesto, para la cual nos podemos ayudar del pie para mantenerla en su sitio. Colocamos los tornillos, es conveniente comenzar por alguno de abajo. Una vez colocados, los apretamos en forma de X. No obstante, hay que tener mucho cuidado con apretar en exceso los tornillos ya que se pueden partir, sobretodo si usamos el peso de nuestro cuerpo para ayudarnos.

Una vez hemos acabado recogemos las herramientas, la rueda y los triángulos si los hemos usado. Recomendamos pasar por una gasolinera y comprobar la presión de la rueda de repuesto para garantizar que es la correcta y que circulamos con seguridad.

Las ruedas de repuesto suelen llevar una pegatina con un número. Este suele ser 80 e indica el límite de velocidad de uso de esa rueda, por lo que ¡No os paséis con la velocidad!

¿Os ha servido la explicación? Esperamos que tengáis muy pocos pinchazos durante vuestra vida pero por si acaso… ¡Nunca está de más!