Si te acabas de sacar el carnet es obvio que te va a faltar experiencia si te comparamos con una persona que lleva al volante al menos dos años. Es por eso que hay limitaciones para aquellos que están en el primer año de conducción y son considerados noveles. Todos hemos pasado por eso así que no te preocupes, si sigues las 4 pautas que te explicaremos en este post, seguro que todo irá bien.

Las personas que son nuevas al volante tienen que tener en cuenta que aún están faltos de tablas y que tienen que manejar el coche con mucha prudencia. Además tienen marcadas una serie de limitaciones recogidas en el Reglamento General de Vehículos que tienen como objetivo mejorar su seguridad y hacer que periodo de entrenamiento sea lo más tranquilo y seguro posible para él y todos los usuarios de la vía.

Lo primero es llevar siempre el identificativo: La L que indica que se tiene poca experiencia al volante. Es una L blanca sobre fondo verde que se coloca en el cristal trasero arriba a la izquierda para que se vea bien. Es obligado durante todo el primero año como ya se ha comentado y si no lo llevas te pueden sancionar.

Se espera que cuando empiezas a conducir no bebas alcohol, y luego tampoco, por supuesto, pero el primer año mucho más. Y no hablemos ya de otras sustancias tóxicas que puedan hacer que la conducción se vea afectada. Recordemos que la normativa permite a los conductores una tasa de alcohol en sangre de 0,25 miligramos. En el caso de los conductores noveles, la tasa permitida se reduce y se sitúa en 0,15 miligramos por cada litro de aire expirado.

El saldo inicial del carnet de puntos son 8. Con ellos podrás hacer frente a sanciones y multas. A partir del segundo año se van a incrementar de forma automática si no ha pasado nada pasando a ser 12 como todos los demás conductores.

¡Muy importante! Los conductores noveles antes no podían pasar de 80 por hora pero la limitación se suprimió. Ya puedes sobrepasar esa velocidad.

Como es normal, los primeros meses al volante se tienen más dudas, menos reflejos y por supuesto hay más falta de precisión en las maniobras. Es por ello que cuando se empieza se vaya con toda la atención posible, precaución total y se evite caer en los errores típicos.

¡Por una conducción responsable!